Aldair Rodríguez (i) de Alianza Lima, en una fotografía de archivo. Foto EFE/ Daniel Piris.

El domingo pasado se jugó el último ascenso a la Serie A de Italia. Los equipos que disputaban ese animado puesto eran Bari y el Cagliari de Italia. En el partido de ida jugado en Cagliari igualaron a un gol por lado. El gol de equipo local de ese partido lo anotó el ariete peruano Gianluca Lapadula. En el partido de vuelta de visItante en Bari, el Cagliari se impuso por 1-0 sobre el Bari. El gol anotado de Cagliari fue anotado por el delantero italiano Pavoletti, quien había ingresado cinco minutos antes. Este gol fue anotado en tiempo de adición en el minuto 94 del partido. Con esta milagrosa anotación, Cagliari logró el tan ansiado ascenso a la serie A de Italia.

El equipo peruano de Alianza Lima se coronó campeón del torneo apertura luego de 18 jornadas con un total de 42 puntos. En el segundo lugar, con 35 puntos, se colocó el conjunto de Sporting Cristal. En tercera ubicación quedó Universitario de Deportes con 34 puntos. En este torneo el conjunto victoriano se hizo muy sólido de local y tuvo muy importantes victorias de visitante que le permitieron obtener la regularidad necesaria para ganar.

Es necesario mencionar que en los últimos tiempos de este año en curso varios jugadores uruguayos referentes expresaron su malestar por los penales otorgados de manera sostenida a Argentina. Esto benefició al conjunto argentino a ganar el mundial de fútbol, lo que definitivamente no agradó para nada a los directivos de FIFA. Interesante que al desarrollarse a fines de mayo y principios de junio en Argentina el mundial Sub-20, la selección uruguaya fue la ganadora.

Un hecho que llama poderosamente la atención es que Israel, que clasifica por Asia (Indonesia, dueño de la sede inicial, no quería que participara por hechos políticos y se le quita la sede que va a Argentina) le gana a Brasil por 3-2 en tiempo suplementario. La selección brasileña, que le había ganado dos veces en el Sudamericano a Uruguay, e Israel nunca había llegado a semifinales en su historia. El otro semifinalista sorprendente fue Corea del del Sur que nunca había llegado tan alto en la competencia.

Además, la selección italiana masculina de mayores viene de dos eliminaciones en eliminatorias seguidas a dos mundiales y llega a la final ante Uruguay. A mi entender, por todo lo expuesto, Uruguay gana el mundial Sub-20 simplemente para silenciar a los jugadores uruguayos y cerrar definitivamente los comentarios sobre la competencia de mayores. Otra cosa hubiera sido si los semifinalistas fueran selecciones de peso y Brasil hubiera sido el rival de Uruguay y la selección charrúa le hubiera ganado. No ocurrió así.

Queremos un fútbol limpio y trasparente. Ha salido en Netflix un documental que explica más profundamente toda la corrupción en el fútbol de parte de la FIFA. En este blog nos llama la atención que Uruguay haya ganado un mundial Sub-20 si en todas las ediciones anteriores no ha tenido participaciones exitosas y porque Israel le gana a Brasil en esa categoría. Hacemos también llamado de atención a Grecia, ganador de la Eurocopa 2004 justo antes de las olimpiadas en Grecia. Luego de esa victoria, Grecia nunca figuró nunca más en esa competencia. Tantos hechos similares, levantan suspicacias y nos llevan a estar mucho más atentos a la hora de analizar los campeonatos de fútbol. Basta ya de corrupción en el fútbol, que gane el mejor y no el que más plata le da a la FIFA.